Sofreír 2 a tres piezas de pollo chico por persona, lo ideal es usar dos tipos de carne (esta receta es sin conejo porque no es kosher) para conseguir el sabor especial de la paella. Se pueden agregar al final, albóndigas chicas de carne precocidas. No utilice chorizos o embutidos porque tienen un sabor muy fuerte y la paella tendrá gusto a chorizo y no a paella. La carne tiene que quedar bien frita. Lo que queda pegado debajo en la paellera es lo que dará el sabor tan peculiar.
Corte un pimiento en tiras y agregar a la fritura. Servirá de decoración para cuando la paella esté lista. Retirar del fuego cuando esté tierno y un poco quemado y guardar. (En Valencia se llama la “gamba de montaña”).
Agregue un poco de sal al aceite para que no salpique mucho.
El fuego tiene que estar fuerte para que la carne adquiera color.
Agregar dos tipos de verduras: un vaso de chauchas y un vaso de arvejas (yo use congeladas). Agregar 4 dientes de ajo picado, freír todo con cuidado para que no se queme. Añadir 3 cucharaditas de pimentón, 2 cucharadas de tomate triturado.
Se agrega agua, que llegue hasta las asas de la paellera, dejar hervir 15’.
Agregar algo de cúrcuma para que le de color, vertir 300-400 g de arroz. Esparcirlo en forma pareja y moverlo un poquito. Dejar hervir unos 20’ dependiendo del tipo de arroz que use. Yo use una mezcla de Thai rice y Jasmin rice.
Probar si está bien de sal y agregar para rectificar mientras haya caldo.
Al final añadir las “gambas de montaña” para decorar la paella.
Dejar que se consuma el caldo que queda, el arroz tiene que quedar al dente, no debe quedar ni pastoso ni crudo, en su punto justo. Dejar el fuego encendido un par de minutos más en mínimo para que el arroz se pegue un poco al fondo y adquiera ese gusto típico.
Y BUEN PROVECHO!!!!
Stellusz place 
Deja un comentario